¿Sabes lo que más me fascina de los hombres? La
capacidad que tienen para hacer crueldades y que no les importe nada. ¿Y de
las mujeres? Lo tontas que podemos llegar a ser por cada uno de ellos y lo que nos
cuesta decir "adiós". Es como que la idea de decir adiós nos rompe
por dentro, quieres huir pero hay algo que no te deja. Ellos son el adiós que
nunca sabremos decir. No sabemos como hacer para que nuestros sentimientos se detengan y al
final acaban tomando el control sobre nosotras, y nunca podemos evitarlo.
¿Intentamos de la mejor manera alejarnos de ellos... o no queremos hacerlo? Vos
sos la que dio todo por él. Pensas que no deberías quererlo pero lo quieres,
simplemente no podes mirar a otro lado. Pero es que no sabemos querer, nunca nos han
enseñado y sólo se aprende a base de caídas, y, normalmente con el peor personaje que
podrías haber elegido entre las mil millones de personas que hay en el mundo,
pero aún así, le elegirías entre billones, estoy segura. Y es que esos que
van de que "se comen el mundo" ni si quiera lo han probado, y aunque
cada una de nosotras probablemente no seamos la mejor chica del mundo, ni la
más perfecta, somos ese tipo de chica que necesita sacarle una sonrisa antes de
irse a dormir. Porque al igual que podemos decidir como pasar el
tiempo, seleccionar lo que comemos, elegir las palabras que usamos y la ropa
que nos vamos a poner todos los días, también podemos elegir con quién nos
relacionamos, con quién compartimos nuestras vidas y con quien queremos gastar
toda nuestra energía sólo por verle sonreír. Así que,
al igual que ellos, nosotras deberíamos aprender a decir "adiós" de
vez en cuando.. Nosotras deberíamos aprender a valorarnos más.
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